La dieta vegana es rica en proteínas vegetales, hierro, calcio, magnesio, ácido fólico, vitaminas B, C y E y minerales esenciales. Gracias a su alto contenido en fibra y antioxidantes y a la eliminación de grasas saturadas, la dieta vegana ayuda a mitigar los problemas de salud relacionados con la obesidad, las enfermedades cardíacas, la diabetes y el cáncer.

Ya son muchas las generaciones que han ignorado la espeluznante crueldad infligida contra los animales. Como todo se reduce al dinero, las grandes corporaciones prefieren pasar por alto el bienestar de los animales y de sus trabajadores. Aun así, cada vez somos más los que no estamos dispuestos a mantener una de las industrias más atroces que existen.

Los cultivos y el agua necesarios para alimentar a los animales así como el resto de procesos implicados en la industria cárnica son factores que contribuyen a la deforestación, la desnutrición en los países más pobres, la pérdida de hábitat y la extinción de especies. El cambio al veganismo es crucial para reducir nuestro impacto sobre el medio ambiente.